Hoy ha sido un día muy emocionante, he dado mi primera clase yo sola, de psicomotricidad, y he participado en la reunión de padres. ¡Ha sido una experiencia muy enriquecedora!
Ha comenzado mi día ayudando al niño con ceguera de la clase de 5 años a ir al patio, donde se hace la fila. Después he vuelto a la clase de 3 años donde mi niña marroquí me estaba esperando con una sonrisa en la cara y los brazos abiertos.
En la asamblea, el niño con TGD ha estado muy inquieto aunque no se ha salido de la zona destinada a ella. En la asamblea hemos pasado lista, hemos visto el tiempo que hacía y recitado el poema del otoño.
Después hemos ido a las mesas, ha realizar una ficha del proyecto. La ficha que tocaba era el rincón de las construcciones. Han pintado el dibujo y después han hecho una serie de figuras geométricas con gomets. Lo han hecho muy bien. Han diferenciado con bastante facilidad las figuras.
Cuando todos han terminado nos hemos aseado y hemos almorzado. Han almorzado bastante bien aunque a alguno le hemos tenido que ayudar. Hemos salido muy pronto al patio porque ha la maestra le tocaba patio y allí hemos estado jugando. Cuando he salido, algunos niños se han venido conmigo a estar de mi mano ya que todavía sienten que en el patio no están protegidos y van a buscar la protección en las manos de las maestras.
Después del patio hemos estado mirando de que color son las hojas de los árboles, aprendiendo una nueva canción y terminando las fichas que algunos alumnos tenían pendientes. La media hora se ha pasado volando y enseguida hemos tenido que recoger para ir a casa y al comedor.
Por la tarde he llegado antes para preparar la sesión de psicomotricidad. Cuando ha llegado la maestra-tutora le he ayudado a recortar unas fotos para la decoración de la entrada. Llegada ya la hora de que los alumnos volvieran a clase hemos terminado una ficha y nos hemos ido a psicomotricidad. La sesión ha sido un desastre. Los alumnos estaban muy alterados y no han hecho mucho caso a las actividades. Espero que la próxima vez salga mejor. Yo intentaré adaptarme mejor a ellos con las actividades e idearé alguna manera en la que no estén tan distraídos. La única actividad que ha salido genial ha sido el masaje de relajación. Los alumnos han atendido mucho y han hecho caso a las instrucciones.
A las cuatro y media hemos acabo y se han ido ha casa. Las maestras nos hemos quedado preparando la clase para la reunión de esta tarde. La reunión ha ido muy bien. Había muy poquitos padres pero los que había estaban muy interesados en los temas a tratar. La maestra-tutora me ha presentado y los padres le han dicho que ya me conocían, que sus hijos no paraban de hablar de mí. En esta reunión, después de que la maestra-tutora terminara de hablar, he hablado yo y les he propuesto una intervención, con la cual han estado de acuerdo y me han dado su palabra de colaborar conmigo en todo lo que necesite. Me ha encantado. Estaba muy nerviosa y tenía mucho miedo pero al final me he relajado ya que me he dado cuenta de que son personas normales y corrientes que solo les interesa lo mismo que a las maestras: el bienestar de los niños.
¡Hasta mañana!
Después del patio hemos estado mirando de que color son las hojas de los árboles, aprendiendo una nueva canción y terminando las fichas que algunos alumnos tenían pendientes. La media hora se ha pasado volando y enseguida hemos tenido que recoger para ir a casa y al comedor.
Por la tarde he llegado antes para preparar la sesión de psicomotricidad. Cuando ha llegado la maestra-tutora le he ayudado a recortar unas fotos para la decoración de la entrada. Llegada ya la hora de que los alumnos volvieran a clase hemos terminado una ficha y nos hemos ido a psicomotricidad. La sesión ha sido un desastre. Los alumnos estaban muy alterados y no han hecho mucho caso a las actividades. Espero que la próxima vez salga mejor. Yo intentaré adaptarme mejor a ellos con las actividades e idearé alguna manera en la que no estén tan distraídos. La única actividad que ha salido genial ha sido el masaje de relajación. Los alumnos han atendido mucho y han hecho caso a las instrucciones.
A las cuatro y media hemos acabo y se han ido ha casa. Las maestras nos hemos quedado preparando la clase para la reunión de esta tarde. La reunión ha ido muy bien. Había muy poquitos padres pero los que había estaban muy interesados en los temas a tratar. La maestra-tutora me ha presentado y los padres le han dicho que ya me conocían, que sus hijos no paraban de hablar de mí. En esta reunión, después de que la maestra-tutora terminara de hablar, he hablado yo y les he propuesto una intervención, con la cual han estado de acuerdo y me han dado su palabra de colaborar conmigo en todo lo que necesite. Me ha encantado. Estaba muy nerviosa y tenía mucho miedo pero al final me he relajado ya que me he dado cuenta de que son personas normales y corrientes que solo les interesa lo mismo que a las maestras: el bienestar de los niños.
¡Hasta mañana!
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